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La endometriosis es una enfermedad en la que el tejido del endometrio, que es el que recubre el interior del útero, se encuentra fuera de este.
Se trata de una patología que afecta a 1 de cada 10 mujeres en España, sobre todo durante la edad fértil, y que produce dolor agudo, entre otros síntomas. A continuación, te contamos todo sobre ella.
¿Qué es la endometriosis?
El endometrio es el tejido que recubre la parte interna del útero, la cavidad dentro de la cual se desarrolla el feto cuando se produce el embarazo. Es la capa de tejido que se desprende cada mes con la menstruación. Cuando el tejido endometrial crece, de forma anormal, fuera de la cavidad uterina, se produce la endometriosis.
Cuando se produce la endometriosis, el tejido endometrial se puede encontrar en los ovarios, en las trompas de Falopio, en la vejiga o, incluso, en los intestinos. La endometriosis puede presentarse de manera leve, en focos más aislados, o afectar de forma grave a toda la pelvis.
Aunque no se conocen sus causas, se sabe que la endometriosis puede tener una tendencia familiar, de madres a hijas, y suele ser más común en mujeres que no han sido madres, en chicas que han tenido su primera regla muy pronto o cuando hay un himen imperforado que impide la salida de la menstruación.
Síntomas de la endometriosis
La endometriosis puede presentar los siguientes síntomas, sobre todo durante los días de menstruación:
- Dolor menstrual agudo (cólicos menstruales), que en algunos casos llega a ser incapacitante
- Menstruaciones abundantes
- Dolor localizado en la parte baja del abdomen
- Dolor durante o después de las relaciones sexuales
- Problemas de fertilidad
- Cansancio
- Falta de energía
- Diarrea y/o estreñimiento
- Hinchazón en la zona abdominal
Sin embargo, como algunos de estos síntomas pueden confundirse con otros, propios de los periodos menstruales, la endometriosis es una enfermedad bastante difícil de detectar. Pero, como adelantábamos en el título de este artículo: la regla no tiene por qué doler.
Tanto durante el embarazo, como cuando llega la menopausia y la menstruación se retira, los síntomas de la endometriosis pueden mejorar e, incluso, desaparecer, ya que las hormonas habrán disminuido su actividad, dejando de estimular, de forma temporal o definitiva, el tejido endometrial.
Diagnóstico de la endometriosis
La endometriosis es una enfermedad muy complicada de diagnosticar pues, como hemos comentado anteriormente, sus síntomas, sobre todo los dolores tan fuertes, pueden identificarse como sensaciones normales, asociadas al mero hecho de tener la regla.
Todas las mujeres deben acudir, por prevención y necesidad, una vez al año al ginecólogo, sobre todo a partir de la primera menstruación. Cuando se perciben estos fuertes dolores, además de los otros síntomas que hemos comentado, es fundamental que la mujer consulte con su ginecólogo para que este pueda valorar si existe cualquier problema, sobre todo cuando se trata de endometriosis. En consulta, el especialista podrá realizar una ecografía para visualizar el estado del útero y el tejido endometrial, para así detectar una posible endometriosis.
Tratamiento de la endometriosis
El tratamiento de la endometriosis deberá ser diferente en cada caso, para así poder adaptarse a las necesidades y condiciones de cada mujer.
Si la mujer no desea quedarse embarazada, se le podrá recomendar un tratamiento hormonal, como la píldora anticonceptiva. También se podrán recetar analgésicos (paracetamol) y, en casos avanzados o más graves, la endometriosis se podrá tratar mediante cirugía.
Si, por el contrario, la mujer se plantea ser madre, lo ideal es que busque embarazo cuanto antes para evitar que la endometriosis lo dificulte. Si la pareja está buscando más de 6 meses embarazo, o si saben que la endometriosis está en grado avanzado, lo aconsejado es que consulten lo antes posible con su ginecólogo o especialista en reproducción asistida para poder ayudarles.
Como siempre comentamos, si tienes cualquier tipo de síntoma de los que hemos explicado, lo mejor es que acudas a tu ginecólogo para que pueda valorarte y ver si existe cualquier problema. Lo importante es que no sufras innecesariamente porque, como decimos: la regla no tiene por qué doler.
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